¿Sabías que el esguince de tobillo es posiblemente la lesión más común?. Es una lesión muy habitual, y no solamente en deportistas. Hay que tener en cuenta que un esguince de tobillo puede producirse accidentalmente simplemente teniendo un resbalón, torciéndonos el tobillo con un bordillo, saltando y plantando mal el pie en la caída, etc.
Ya vimos en una entrada anterior que un esguince se produce cuando los ligamentos son forzados más allá de su capacidad y se dañan, pudiendo haber varios grados en función del afectamiento.
Una vez que se ha producido el esguince lo mejor es recurrir al conocido método “RICE”, basado en la aplicación de frío local, reposo, elevación de la zona afectada (en este caso el tobillo), y compresión. Cuando vemos que ha remitido la inflamación en el tobillo podemos comenzar una movilización controlada, que iremos incrementando progresivamente evitando forzarlo.
En este periodo es recomendable utilizar un vendaje que refuerce el tobillo, pero que también permita su movilidad sin dolor.
Uno de los problemas más habituales del esguince de tobillo es volver a recaer, o que el dolor pueda hacerse crónico, lo que vulgarmente llamamos “esguince mal curado”. Por ello es muy conveniente poner nuestra recuperación en manos de profesionales.
Si recientemente has sufrido un esguince de tobillo no dudes en venir a ATL Fisioterapia y Pilates. Te ayudaremos con tu recuperación, porque tu salud y bienestar es lo que nos importa.